¿Dónde hay un médico que me cure las heridas?
Mis hijos, desunidos, matándose entre ellos, haciendo correr la sangre.
Mis hijos, asesinados por sus hermanos, solos en sus pueblos y sin poder defenderse.
Y todos ellos son mis hijos y mi vida.
¿Dónde está la comunidad internacional que ponga fin a tanta violencia? ¿Dónde los gritos de otras naciones que se hermanen conmigo?
¿Cómo puedo curar tanta herida?
UN GRAVE PROBLEMA EL DE MÉXICO, MILAGROS, MUY GRAVE, Y TE LO DICE UNA PERSONA QUE VIVE EN PAIS COMO COLOMBIA QUE NO ES MUCHO MEJOR.
ResponderEliminarBESOS.
Los gritos de libertad, a veces, son gritos de ayuda descarnada y lanzada como bofetada a todos aquellos, que se rompen las vestiduras durante una hora.
ResponderEliminarLa vergüenza del ser humano no es no prestar ayuda, o prestarla durante un corto e insuficiente tiempo, no, la vergüenza radica en mirar para otro lado.
Un abrazo
Jesús